La escolopendra (no apta para Aparito y Mariate)

Era una tarde calurosa, me encontraba sola en casa porque mi marido se había ido a Holanda a ver el partido del Sevilla- Middlesbrough ¡¡¡ en coche!!! (pero esa es otra historia). Como iba diciendo, me encontraba sola en casa, me dirigía a la cocina para comer algo (para variar), estaba descalza como acostumbro a andar por mi casa, y de repente....... miro al suelo y.......¿que es eso, Diomiodemiarma? Deslizandose por el suelo, saliendo de detrás de la nevera, un asqueroso y repugnante bicho se paseaba por mi cocina como Pedro por su casa. Me eché las manos a la cabeza diciéndo en voz alta ¡¡ No puede ser!! ¡¡ No puede ser!!
Por unos segundos perdí mi presencia de espíritu, e impulsivamente agarre el bote de "fru-fru" (yo le llamo así al insecticida), y lo descargué casi entero encima de "aquello". Mientras tanto intentaba recordar aquellos libros de insectos que mi hermano mayor tenía, y mentalmente iba pasando las páginas para intentar localizar semejante bichejo. Y mientras este se retorcía nadando en espuma blanca, lo recordé.
¡¡¡ Coño, esto es una escolopendra !!!

¡¡¡ La madre que la parió!!! ¿que hace esto en mi cocina? He de decir, en favor del bicho, que yo vivo en el campo, y pensándolo friamente, yo soy la que ha usurpado su habitat natural, pero bueno, se siente.... yo soy mas grande.
Cuando por fin dejó de moverse, agarré la escoba y la barrí hacia el porche delantero de la casa, pero observé que seguía moviendose - ¡¡¡ Mierda bisho ¿porque no te mueres de una vez? - fueron mis palabras, pero mientras las pronunciaba me sentí extremadamente cruel, y empezó a darme pena ver sufrir al animalillo. Así que sin pensarlo, cogí un patin de ruedas y le pasé por encima 3 o 4 veces. ¡¡¡ Pero no se moría!!! Seguian moviendose sus patas. De repente, sonó el telefono. Era mi madre. Le dije que estaba un poco liada porque me estaba peleando con un bicho, y recordando mi madre el tamaño de los bichos de mi casa donde los mosquitos llevan un Winston en la boca y tienen liquido de frenos, me dijo - Sigue con lo tuyo, yo te llamo más tarde -.
Pero cuando volví al lugar del crimen .... ¡¡¡AAAhhhhhggggggg!!!! ¿Donde esta "er bisho"?? Había desaparecido. ¿recordaís las pelis de terror en las que la tipa vuelve al lugar donde mató al malo, y de repente ya no está? Pues la mismita sensación tuve yo.
Ahora llevo botas de agua cada vez que entro en mi casa, un paño atado a la cintura a modo de cartuchera, y como pistola el bote de "fru-fru" calibre Familiar.
¡¡ A ver quien puede mas !!